El ajuste impulsado por el gobierno español lleva la desocupación a su techo histórico: 24,63%

53.500 trabajadores perdieron su empleo en España en el segundo trimestre de este año por lo que la desocupación (“paro” en términos españoles) alcanzó a 5.693.100 personas. Esta cifra equivale al 24,63% de la población económicamente activa, según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

La tasa actual de desempleo (24,63%) no sólo rompe el récord histórico de 24,55%, registrado a inicios de 1994, sino que supera el máximo previsto por el gobierno del presidente Mariano Rajoy para todo el 2012.

De esta manera, el ajuste presupuestario y el achicamiento del estado emprendido por el derechista Partido Popular (PP) y por las comunidades autonómicas han profundizado la crisis que se iniciara durante la gestión del socialista José Luis Rodríguez Zapatero.

Toni Ferrer, secretario de Acción Sindical de la Unión General de Trabajadores, advirtió que las estadísticas “vienen a confirmar el fracaso de las políticas del PP en estos seis meses porque en un trimestre que tradicionalmente es de los mejores para la ocupación se destruye empleo”. Por su parte, la secretaria de Empleo de la central sindical Comisiones Obreras, Paloma López, indicó que “se está produciendo una destrucción masiva de empleo, las políticas del Ejecutivo son erróneas y Rajoy tiene que rectificarlas con urgencia”.

Por sectores, la mayor subida de desempleo se produjo en la industria (23.500 personas), seguida por la agricultura (11.400), mientras que se registraron descensos en servicios (84.500) y en la construcción (40.500). Aún así, resulta llamativo que los contratos de la temporada turística de Semana Santa y del verano no sirvieran para paliar la escalada de la desocupación.

Así las cosas, las consecuencias de la crisis financiera y económica comienzan a hacer crujir el entramado social del país europeo, que evidentemente tardará en recuperarse. El desempleo juvenil (menores de 25 años) golpeó al 53,28% de los jóvenes en el segundo trimestre, marcando un nuevo techo. El número de hogares que tiene a todos sus miembros activos desempleados, experimentó un aumento de 153.400 respecto al trimestre anterior y se situó en 1.728.400.

Además, en medio de un rebrote de xenofobia, la tasa de desempleo entre los extranjeros se situó en 35,76 % (13 puntos más que el promedio) y llegó a 1.233.400 personas. Si bien aquí hay una disminución de los índices, la misma se explica por el éxodo de extranjeros que regresaron a sus países de origen o buscaron otras zonas para mejorar sus condiciones de vida

El gobierno, a través del secretario de Economía, Fernando Jiménez Latorre, dijo ante la prensa que el incremento del desempleo “no es positivo”, pero aseguró que está “en línea” con las previsiones y que confirma que buena parte del “ajuste” del sector privado ya se llevó a cabo.

Esa, precisamente, es una de las condiciones que los organismos multilaterales de crédito, la Unión Europea y la canciller alemana Ángela Merkel imponen a España para enviar fondos a modo de “rescate total”. En este esquema, otro dato relevante es el aumento del desempleo en el sector público, donde entre abril y junio se destruyeron 63.000 puestos de trabajo debido a las políticas aplicadas.

El resultado de las mismas recetas que se aplicaron en la Argentina durante el auge del neoliberalismo y del Consenso de Washington es, hasta ahora, que una de cada cuatro personas en España carece de trabajo.