El martes pasado, en medio de una reunión, el
subsecretario de Salud porteño y actual interventor del Borda, Néstor Pérez
Baliño, exhibió un documento que generó indignación y alarma. Se trata de un
acta de cesión del predio del hospital al gobierno de la ciudad de Buenos Aires
en la que, lejos de cederse “solo” 2 hectáreas como se había indicado
oficialmente, las hectáreas cedidas eran 14, o sea, todo el neuropsiquiátrico.
Así, en “el acta de restitución y transferencia” del 14 de mayo firmado ante la Dirección General de Administración de Bienes, acordaron el traspaso interno del inmueble ubicado en la calle Ramón Carrillo, “identificado catastralmente como: Circunscripción 3, Sección 16, Manzana 23, Fracción B”. Pero la cancha de fútbol y el taller 19 (que originalmente eran los únicos afectados) se encuentran en la Fracción C. En la B se ubica el hospital entero, que según el propio plano adjuntado tiene una superficie de 141.860 m2.
Así, en “el acta de restitución y transferencia” del 14 de mayo firmado ante la Dirección General de Administración de Bienes, acordaron el traspaso interno del inmueble ubicado en la calle Ramón Carrillo, “identificado catastralmente como: Circunscripción 3, Sección 16, Manzana 23, Fracción B”. Pero la cancha de fútbol y el taller 19 (que originalmente eran los únicos afectados) se encuentran en la Fracción C. En la B se ubica el hospital entero, que según el propio plano adjuntado tiene una superficie de 141.860 m2.
Ante ese “error”, Pérez Baliño fue obligado
por los presentes a rectificarse de puño y letra pero, en los papeles, el
ministerio de Desarrollo Urbano tiene hoy en su poder todo el terreno del Borda.
Recordemos que el gobierno porteño planea
mudar a la zona la jefatura de gobierno y cinco ministerios constituyendo el Centro
Cívico. A cambio, prometen, mejorarán la infraestructura del maltrecho hospital
que, entre otras cuestiones, tiene el gas cortado en parte de sus
instalaciones.
Este hecho se suma a las sucesivas denuncias
de los trabajadores del hospital que señalan el negocio inmobiliario detrás de
la iniciativa, los intentos de desmantelar el neuropsiquiátrico y el “amedrentamiento”
por parte de la Policía Metropolitana
a quienes resisten en el lugar.
La Legislatura aún no aprobó cómo se financiará la iniciativa
del Centro Cívico y el proyecto ni siquiera fue tratado en la Comisión de Obras
Públicas. Sin embargo, el gobierno PRO ya adjudicó la obra a una empresa
privada.
Texto editado usando como fuente Tiempo Argentino.